domingo, 27 de marzo de 2016

Una vida dedicada al fútbol

Hace apenas unos días moría de cáncer Johan Cruyff, a los 68 años. La noticia pronto inundó de lágrimas las cuencas de los ojos, no solo de familiares y amigos, sino de todo el mundo del fútbol.

Johan Cruyff  fue un ex­-futbolista holandés. Debutó en el Ajax de Amsterdam y dejó una importante huella en este club, en el que conquistó un gran número de títulos: seis ligas holandesas, cuatro copas nacionales y cinco títulos a nivel internacional -entre ellos, tres Copas de Europa-. Pero el equipo holandés se le hizo pequeño y fichó por el FC Barcelona ganando una Liga (1974) y una Copa (1978). Tras su paso por el equipo blaugrana volvió a vestir la zamarra del Ajax y no dejó de ganar títulos; tres ligas y dos copas nacionales.

A nivel de selecciones, llegó a una final del Mundial en 1974 ante Alemania que se saldó con la victoria germana, tras un inicio espectacular de “La Naranja Mecánica”, en la que Cruyff, en el minuto uno y tras una larga posesión holandesa, que duraba desde el pitido inicial arrancando desde su  propio campo, fue sorteando alemanes hasta entrar en el área y forzar un penalti que transformaría Neeskens.

Durante esta etapa como jugador se le reconoció por su regate, sus goles y la forma que él y sus equipos tenían de jugar; dominando el balón. Y cómo no, también será recordado por su dorsal, el 14, que siempre será asociado al genio holandés, de igual forma que sucede con 10 de Argentina a Maradona o el 13 de Alemania a Gerd “Torpedo” Müller.

Al finalizar su carrera como jugador, llegó la hora de empezar a dirigir desde el banquillo, y se basó en una particular filosofía “si nosotros tenemos el balón, no nos pueden marcar gol”. Comenzó volviendo a sus orígenes, al frente del equipo que permitió su debut, el Ajax, donde cosechó dos copas nacionales y una recopa.

De igual forma que hizo como futbolista, del Ajax dio el salto al FC Barcelona, y es aquí donde nace gran parte de la leyenda, tanto del club culé como de Cruyff. Esta leyenda no es solo por los títulos conquistados, un amplio palmar, sino por la implantación de su filosofía y su forma de ver el fútbol, que aún predomina en el equipo barcelonés. 



Fuente: www.elpoderdelapalabra.com.mx


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